¿Cómo separarme de mis emociones y mejorar mi rendimiento?
¿Te gustaría saber desconectar para mejorar tu rendimiento?
Hola, soy Rafeta Pallarés y quiero ayudarte a que puedas separar tus emociones para mejorar tu rendimiento.
Lo primero que debes saber es que todas las personas sentimos diferentes emociones en nuestro día a día, y algunas de estas pueden perjudicar a nuestro rendimiento.
Además, debes saber que la habilidad de separar las emociones no cura las heridas, sino que te ayuda a potenciar tu rendimiento en un momento adecuado.
¿Qué emociones tengo en mi día a día?
Todas las personas sentimos emociones en nuestro día a día, y realmente ninguna es mala. Es decir, no hay emociones “positivas” o emociones “negativas”, lo que hay son emociones que nos hacen sentir bien, y otras que nos hacen sentir peor.
A pesar de que haya emociones que nos hagan sentir peor no quiere decir que sean malas, todo lo contrario, cuando una emoción nos hace sentir mal nos está indicando que pasa algo, y que eso debemos cambiarlo.
Reconoce tus propias emociones.
Cuando empieces a reconocer tus propias emociones, esas que te hacen sentir bien o mal, podrás empezar a trabajarlas. De lo contrario, será imposible que consigas manejar tus emociones para potenciar tu rendimiento.
Para reconocerlas lo que debes hacer es centrarte en ti, en el momento presente y aceptar cómo te sientes, no esconder tus sensaciones, sentimientos, etc.
¿Cómo me hacen sentir mis emociones?
Una vez hayas reconocido tus propias emociones podrás empezar a ver cómo te hacen sentir. Seguramente tengas emociones en tu día a día que te hagan sentir bien, y otras que te hagan sentir mal. Pues vas a ver cuáles debes trabajar:
- Las emociones que te hagan sentir bien deben trabajarse para que sigan siendo las mismas, y, además, debes trabajar la situación para que estas emociones no te hagan sentir una falsa esperanza, o que te desborden por sentirte demasiado bien. De lo contrario, podría perjudicar a tu rendimiento.
- Las emociones que te hagan sentir mal deben trabajarse para intentar cambiar la situación, y de esa forma poder cambiar la emoción que sientes. Posiblemente vivas situaciones que sea muy difícil cambiar la emoción, pero si aceptamos esta situación y buscas la forma de trabajar la situación lo mejor posible, podrás potenciar tu rendimiento.
Para trabajar las emociones debes contar con un psicólogo, porque estamos capacitados para ayudarte.
¿Cuándo estoy entrenando me superan las emociones que me hacen sentir mal?
Cuando entrenas puede que haya algunos momentos que te superen las emociones que te hacen sentir mal, y por esa razón es tan importante que aprendas a separarte de estas.
Cuando te separas de las emociones consigues que no te perjudiquen a tu rendimiento, o al menos puedes ver la forma de potenciar tu rendimiento lo mejor posible. Para ello, debes entrenar algunos aspectos que te ayudarán a gestionar las emociones y separarte de ellas, pero ten en cuenta un aspecto muy importante, separarte de las emociones no significa curar una situación NO, solo consigues no vivir esa emoción un momento concreto, para intentar rendir al máximo.
¿Qué funciona y que no funciona para gestionar nuestras emociones?
Para poder gestionar tus emociones vas a ver unos aspectos necesarios que debes conocer, diferenciando lo que sí funciona y lo que no funciona.
No funciona:
Intentar no pensar en lo que me preocupa
Cuando intentas pensar en aquello que te preocupa, realmente le das más potencia al pensamiento, y te lo repites constantemente. Por lo que debes evitarlo a toda costa, ya que de lo contrario no podrás dejar de pensarlo, y tu rendimiento se verá cada vez más perjudicado.
Relajarte y respirar hondo
Respirar hondo y relajarte en los momentos de mayor tensión es muy difícil conseguirlo, para ello debemos tener un entrenamiento muy intenso. Por lo que no te recomiendo que utilices la técnica de contar hasta diez, respirar hondo o relajarte en una competición, si no la has entrenado antes y sabes gestionarla bien.
A pesar de que la hayas entrenado y sepas manejarla bien, debes saber que en algunas situaciones te superarán las emociones, y esto es inevitable.
Liberar la tensión por otras vías.
Liberar la tensión utilizando objetos, dando golpes, gritando, etc. Esta forma de liberar la tensión no es buena, es más, lo único que hará es perjudicar a tu rendimiento. Por ejemplo, romper una raqueta en tenis, dar un golpe al agua en natación, etc. No te ayudará a liberar la tensión de forma correcta, porque realmente lo que pasará es que liberarás mucha energía y perjudicará a tu rendimiento. Es decir, esa forma de liberar tensión te hará más daño a ti mismo y a tus emociones.
Presionarte para tener pensamientos positivos
No sirve de nada presionarse para tener pensamientos positivos, nadie puede tener pensamientos positivos de forma forzada, para conseguir tener estos pensamientos hay que entrenarlo mucho. Por esta razón, si te presionas para tener pensamientos positivos lo único que harás es frustrarte y enfadarte más.
Sí funciona:
Recordar tus virtudes y éxitos
Cuando recuerdes tus virtudes y tus éxitos podrás ver el progreso que has tenido, y esto te ayudará a seguir avanzando en el camino. Todas las personas tenemos virtudes y hemos conseguido algún éxito, y eso nunca debes olvidarlo.
Distraer tu atención hacia un asunto concreto
En vez de forzarte a tener un pensamiento positivo, puedes cambiar tu atención a un momento concreto. Por ejemplo, en el deporte puedes centrarte en los movimientos que estás haciendo, en la colocación del cuerpo, en la fuerza que ejerce tu cuerpo, etc. Esto te ayudará a distraer esos pensamientos o esas sensaciones negativos, y podrás separarte de tus emociones de una forma correcta.
Pensar en el futuro más inmediato
Cuando veas que las sensaciones son muy negativas, intenta pensar en el futuro más inmediato viendo como este mejorará. Posiblemente si consigas que mejore algún aspecto, aunque sea uno pequeño, podrás sentirte mucho mejor.
Pensar en lo que estás haciendo actualmente
Cuando te invaden las emociones y pensamientos negativos, no paras de darle vueltas. Pues evita esta situación, intenta centrarte en ti y en lo que estás haciendo ahora. De esta forma podrás gestionar mejor tus emociones.
Darte permiso para no preocuparte ahora, sino más tarde
En vez de obligarte a no pensar en ello, puedes darte permiso para centrarte en el entrenamiento, la competición o en la actividad que estés haciendo en este momento, para retomar la preocupación más tarde si fuese necesario. De esta forma evitarás que el pensamiento se vea abrumado por la obligación.
Escribir un diario de emociones
Escribir un diario de emociones donde intentes centrarte en aquellas que te hacen sentir bien y en las situaciones que te gusta vivir, con esto no me refiero a que olvides las situaciones negativas o emociones que te perjudiquen. Si te centras en las emociones que te hagan sentir bien podrás potenciar mucho más tu rendimiento, y gestionarás tus emociones mucho mejor.
Descansar, tomarte un respiro
Al igual que darte permiso para preocuparte más tarde, en este momento puedes decidir descansar y darte un respiro. Sí, todas las personas necesitamos descansar en algún momento, y para conseguirlo puedes centrarte en lo que estás haciendo actualmente. Por ejemplo, intentar disfrutar del deporte, de la lectura, de tus amigos, de la actividad que estés haciendo, etc.
Encontrar el motivo que hace que surjan esas emociones
Por último, y muy necesario, deberás trabajar con un psicólogo para encontrar el motivo que hace que surjan esas emociones, puedes trabajarlo solo, pero es mucho más difícil. Trabajar conjunto con un psicólogo te ayudará a conseguir que analices bien la situación y puedas trabajarla.
¿Qué hacer para separarme de mis emociones en el deporte?
Ahora llega el momento de separarte de tus emociones en el entrenamiento o en la competición, y te voy a contar los aspectos que he utilizado yo siempre para conseguirlo.
Centrarte en la competición o entrenamiento
Pensar en la competición o en el entrenamiento, y lo que estás haciendo. Es decir, los objetivos que tienes para la competición, y de esta forma podrás potenciar mucho mejor tu rendimiento. Si te centras en este momento podrás evitar en gran parte los pensamientos intrusivos y las emociones negativas que te invaden.
Recordar tu camino y por qué estás ahí
Cuando llegan los momentos difíciles muchas veces olvidarás el camino, olvidarás por qué decidiste estar ahí, pues recuérdalo para poder seguir avanzando. Es la forma más potente para centrarte en el momento y separarte de esas emociones.
Utilizar el deporte para darte un respiro
El deporte no sirve únicamente para entrenar y competir, también puedes utilizarlo para darte un respiro y desconectar de tus preocupaciones del día a día.
Respirar y visualizar para concentrarte mejor
En este momento sí puedes utilizar la respiración, pero esta respiración debes utilizarla para centrarte en el momento presente y así poder visualizar. La visualización te ayudará a concentrarte y pensar en lo que quieres conseguir, es decir, preparar tu estrategia para conseguir tus objetivos. De esta forma estarás evitando las emociones que te hagan sentir mal, y podrás potenciar mucho mejor tu rendimiento.
Conclusión.
La gestión emocional es necesaria para todos, y en algunos momentos separarte de tus emociones es necesario para poder conseguir tus objetivos. Por esta razón, hemos querido ayudarte a potenciar tu rendimiento a través de la gestión emocional, ya que estas emociones nos pueden perjudicar y afectar a nuestro rendimiento.
¿Quieres que te ayude a conseguir gestionar tus emociones? ¡No te pierdas!
Si leyendo este post te han surgido dudas o tienes alguna pregunta, puedes escribirme en comentarios o en privado, e intentaré ayudarte.
Ahora, si después de leer este post estás pensando en gestionar tus emociones, o necesitas ayuda, te ofrezco tres tipos de ayuda: